domingo, 9 de noviembre de 2008

LOS ROLES





"Los varones, en realidad y en general, han tenido un papel menos importante dentro de la familia tradicional del que ellos se otorgarían. Quiero decir que, aunque por situaciones reales lo descubran ahora, viene siendo así desde hace siglos. Y es cierto que las mujeres hemos permitido que se lo creyeran, para que así pudieramos funcionar todos con relativa tranquilidad. En otro caso habría sido imposible, debido a su forma infantil de concebirla y de comportarse con, por y para ella. Cuando sepan qué quieren en esta vida, cuando alcancen la madurez de la mujer, empezará su historia, en relación a la familia también, pero para entonces problablemente esta no exista ni bajo alguna de las acepciones que hoy le demos. Quizá les sirva entonces para su propia sanación, o salvación, al menos."





Comentario 24
linda
08-11-2008 - 13:16:35h




Nace la familia transoceánica
María Antonia Sánchez Vallejo


Las mujeres inmigrantes revolucionan el modelo patriarcal al convertirse en sostén de sus hijos


El País 08/11/2008



3 comentarios:

Anónimo dijo...

Bueno la emigración a América en el XIX y XX tiene claros exponentes, sin retrotraernos a Marco y su mono Amedio, muchas madres españolas salieron, algunas incluso todavía se encuentran en Francia y Suiza, sin olvidarnos de Venezuela, Uruguay y Argentina.

Lo que pasa es que eran tiempos de los vapores, matrimonios por poderes y la Globalización sólo estba en ciernes, ahora nos encontramos con lo de Pobres del Mundo, Levantaos, si Lumumba y Ché Guevara lo hubieran podido ver...

:-)

Anónimo dijo...

Comentario facha el de esta "linda" ¿Tú también opinas lo mismo? ¿Por qué mezclar esa sandez con las mujeres de fuego de Silvio?

Féliz aniversario

ano000nimo

La Cibeles dijo...

...aniversario..aniversario...sigo sin llamarme Almudena....¿?


Ni quito ni pongo, pero las familias monoparentales con mujeres se sostienen y con hombres se desintegran, en general...


Conozco mujeres emigrantes, de varios países, que resultan un ejemplo monumental para los días en los que una se pone triquismiquis porque la vida no le sonríe. Sus familias (en sentido amplio) y ellas mismas tienen el futuro que jamás les dieron sus "paterfamilias".