LOS CUENTOS DE SIEMPRE

La cigarra y la hormiga
Cuento clásico

La hormiga trabaja a patas partidas, cargando cosas todo el verano bajo un calor aplastante.
Construye su casa y se aprovisiona de víveres para el invierno.
La cigarra piensa que la hormiga es una pringada, y se pasa el verano de chiringuitos, riendo, bailando y ligando.
Cuando llega el invierno, la hormiga se refugia en su casita donde tiene todo lo que le hace falta hasta llegar la primavera, por lo menos, gracias a su esfuerzo.
La cigarra tiritando, sin comida de reserva y sin cobijo, muere de frio con las bajas temperaturas invernales.


La cigarra y la hormiga
Versión española

La hormiga trabaja a patas partidas, cargando cosas todo el verano bajo un calor aplastante.
Construye su casa y se aprovisiona de víveres para el invierno.
La cigarra piensa que la hormiga es una pringada, y se pasa el verano en chiringuitos, riendo, bailando y ligando.
Cuando llega el invierno, la hormiga se refugia en su casita donde tiene todo lo que le hace falta hasta llegar la primavera, por lo menos, gracias a su esfuerzo.
La cigarra tiritando, acusa y organiza una rueda de prensa en la que pregunta a la sociedad por qué la hormiga tiene derecho a vivienda y comida cuando quiere, cuando hay otros, con menos suerte que ella, que tienen frio y hambre.
La televisión organiza un programa en vivo en el que la cigarra sale pasando frio y calamidades y a la vez muestran partes de un video de la hormiga bien calentita en su casa y con la mesa llena de comida.
Los españoles se sorprenden de que en un pais tan moderno como el suyo dejen sufrir a la pobre cigarra, tan desafortunada, mientras que otros viven en la abundancia.
Las ONG´S se manifiestan delante de la casa de la hormiga.
Los periodistas de prestigio publican una serie de artículos en los que se cuestionan seriamente de dónde procede el bienestar de la hormiga, y se preguntan como la hormiga ha podido enriquecerse a espaldas de la cigarra, e instan al Gobierno a que aumente los impuestos de la hormiga, de forma que las cigarras puedan vivir mejor.
Respondiendo a las encuestas de opinión, el Gobierno elabora una Ley para la igualdad económica, con caracter retroactivo.
Los impuestos de la hormiga aumentan y además tiene un juicio por no contratar a la cigarra como ayudante en verano.
Las autoridades embargan la casa de la hormiga, ya que esta no tiene suficiente dinero para pagar la multa del juicio y los impuestos.
La hormiga se va de España y se instala con éxito en Finlandia; se olvida de todo.
La televisión hace un reportaje donde sale la cigarra pidiendo por justicia una operación en la seguridad social para su sobrepeso, ya que se ha comido casi todo lo que habia guardado la hormiga mucho antes de que llegue la primavera.
La antigua casa de la hormiga se reconvierte en un albergue social para cigarras, aunque se deteriora al no hacer sus inquilinos nada para mantenerla en buen estado.
Al Gobierno se le reprocha no poner los medios necesarios para el bienestar de las cigarras.
Una Comisión de investigación, que costará 10 millones de euros se pone en marcha.

Entretanto la cigarra muere de sobredosis, y el país se conmociona.
La Ser y TVE comentan el fracaso del Gobierno para intentar corregir el problema de las desigualdades sociales y el fracaso de las políticas de integración.
La casa es tomada por unas arañas okupas inmigrantes.
El Gobierno se felicita por la diversidad cultural del país.